FOZ DE FAGO

 Como todas las temporadas hay que hacer la visita a este  barranco .
 Aunque sea un barranco de los denominados de iniciación,  estéticamente es una maravilla.  Horadado en roca caliza, de unos dos kilómetros y medio  de descenso y ciento cuarenta metros de desnivel.

  Este año , debido al invierno tan seco,  vamos antes de lo acostumbrado y esperamos
agua muy fría.

    Situado unos cuatro kilómetros antes del pueblo de Fago, yendo desde Majones.
    En esta ocasión optamos por combinar vehículos, con lo cual, la aproximación es
 inmediata y el retorno de unos 10 minutos.
   

 La primera parte del barranco es de carácter
 abierto,varios saltos cortos y destrépes .

  Es cierto el agua esta muy fría , duelen
 las manos, y el caudal es normal.

  Al llegar a la zona cerrada del barranco.
Comprobamos el primer salto desde arco
natural, pero vemos que no es factible,
debido a que la gran crecida de el año pasado dejo rocas en el fondo de la poza .

 No solo en la poza del primer salto, la crecida se nota por todo el barranco, mas aun en su parte final .
 En este salto hay que andarse con mas cuidado que antes.
Hasta han quitado la cuerda fija que ayudaba a posicionarse para saltar.
Quizás con menos caudal ya no sea saltable.

Zona de transición en la parte
media del descenso donde pasamos
por debajo de arcos naturales y disfrutamos
del entorno mientras paseamos por el río.

 La gorga se vuelve a estrechar llegados al
salto de unos 12 metros.
 Salto bastante comprometido , parte del grupo
lo realiza. Otros optamos por rapelar
hasta una repisa y realizar un salto mas corto.



 Llegamos a la poza del sifón.
 En la cual hace un par de años
se quedó un jabalí que atacó a
varios barranquístas.
 Superamos el sifón por arriba
y llegamos al salto del agujero.

  El último rapel del barranco.
 Saltable pero muy comprometido,
 mas que el anterior ,y dependiendo de caudal.
 Del grupo un valiente lo salta.
 Justo unos metros antes de la cabecera,
esta la entrada a la cueva donde se vieron
obligadas a hacer noche once personas durante
la crecida del año pasado.
 La nochecita que debieron pasar
y estaban a diez metros de la salida ,
pues aunque descenso no acabe aquí,
la ultima parte es de carácter abierto.
 Tras un par de saltos y un tobogán
dejamos el río por la derecha ,
subimos una buena cuesta y estamos en el coche.