Otro paraiso cercano: Acedo - Kampezu

Peri a Orillas del Ega, compañero del día

Después de dos vueltas tremendas los días anteriores, me había planteado dar una vueltica terapéutica para ir suave y recuperar un poco las paticas.

Al final, como siempre me pasa, si que hubo terapia, pero de choque!!!!!

Me llamó Peri que tenía fiesta y a ver si hacíamos algo, ni pude ni quise decir que no, así que se me ocurrió quedar a mitad de camino entre su casa y la mía, en el Kanping de Acedo, donde se come un buen menú del día y la ducha es gratis si te quedas a comer allí.

La idea inicial era y así fué, en la primera parte de la ruta, llegar a Kanpezu por la Dormida Baja a través de la Senda de los Harineros y volver por la misma senda en sentido contrario por la Dormida Alta.

Por si alguno no conocéis este recorrido, os recomiendo sin duda que os descarguéis este track y repitáis esta vuelta, es un auténtico deleite.

Puente Románico sobre el Ega

Con esa intención arrancamos cruzando el pueblo de Acedo, buscando alguna de las sendas más clásicas de la zona, por las que bajamos hasta la orilla del Río Ega, el cual lo cruzamos por el precioso Puente Románico, para cambiando de orilla, ir ascendiendo aguas arriba por la preciosa senda que nos lleva hasta el aforo de Arquijas, por el que cruzamos de nuevo para ascender a la Ermita del mismo nombre.

Ya en las faldas del Monte Costalera, vamos ascendiendo por caminos anchos y exigentes buscando la antes mencionada Senda de los Harineros.

Senda de los Harineros

Esta espectacular senda es un continuo subir y bajar atravesando varios barrancos por un túnel de encinas y bojes, una maravilla en cualquier época del año, pero sobre todo en verano por su frescura.

Esta senda desemboca en la popular Senda de la Dormida en su segundo tramo, un rapidísimo y sencillo descenso que nos devuelve de nuevo hasta la orilla del Ega, os lo recomiendo si no lo conocéis, os encantará.

Aquí Peri, el mejor conocedor de la zona seguramente, me enseña y me hace descubrir una serie de sendas que nos llevan hasta la Ermita de Ibernalo, muy interesantes también.

A partir de aquí, ya por camino más ancho y conocido, vamos subiendo buscando el inicio  de la Dormida de nuevo, pero en su tramo inicial, otra genialidad que recorremos disfrutando a tope hasta alcanzar el punto donde antes habíamos llegado y donde realizaremos en sentido contrario toda la Senda de los Harineros.

Senda de Arquijas

No os importará en absoluto recorrerla ahora en sentido contrario, ya que aunque es el mismo lugar, realizarlo en sentido contrario sigue siendo una gozada.

Finalizada esta, elegimos para bajar lo que antes era una extraordinaria bajada y que en aquella putada de los 6 días de enduro con motos, dejaron muy estropeada y reventada, sacando toda las piedras de lo que era una bajada de tierra increible. Aún y todo sigue siendo una buena bajada, aunque ahora hay que realizarla con más precaución y menos velocidad.

Al fondo Lokiz y campos de Colza en Zuñiga.

Ya abajo, volvemos a cruzar el aforo, pero girando en esta ocasión a la izda, adentrándonos en las Sendas de Zuñiga, muy utilizadas en las Marchas de la Berrueza y que son divertidísimas también.

Aquí Peri, mejor conocedor de la zona, eligió para volver al Ega, un descenso alucinante que si que conocía yo, pero que no recordaba, el Barranco de lo Muertos, lo mejor de toda la vuelta sin duda, y eso es mucho decir, porque toda ella es chulísima.

Inicio de la Dormida

Como no sabemos parar, volvemos a adentrarnos en las Sendas de la Berrueza, ascendiendo y descendiendo de nuevo hasta llegar a la carretera del Valle de Lana por otras clásicas sendas muy utilizadas en las marchas de la zona.

Por si esto fuera poco, decidimos meternos en la zona de Ancín, para disfrutar de otro de los descensos más espectaculares de la zona, como es la bajada a Granada, recuperada y acondicionada hace un par de años para la marcha de la Berrueza.

Espectacular el hayedo en el tramo alto de la Dormida.

Tras cruzar nuevamente la carretera de Galbarra por el Puente de Lana, iniciamos ya el regreso a Acedo por la exigente ascensión al monte de este pueblo, hasta cruzarnos con el track en su parte inicial.

A partir de aquí y para darle un final alucinante a esta ruta, "El Peri" me enseña un laberinto de sendas divertidísimo que nos llevan hasta las primeras casas de Acedo, desde donde vamos ya al Kanping donde dejé la furgo y donde nos tomamos unas jarras de cerveza, estas si, terapeúticas.

Al final salieron más de 40km y casi 1500 de desnivel, vamos que no tiene nada que envidiar al resto de las vueltas.

Os dejo unas cuantas imagenes para que podáis contemplar las maravillosas sendas que tenemos por estos bosques.